A Carlitos, su cuento.
Desde luego he conocido la desdicha como todos los hombres y he conocido también la dicha, como todos los hombres. Estuve en el infierno y el paraíso, como Dante, el cual señala...
Llevando en su mano derecha la cesta de plástico con los productos de la compra, Caridad se acerca a la caja en la tienda de Adham. Aborrece entrar a este establecimiento, y aborrece encontrarse con s...
Era una mañana gloriosa. Una luz dorada lo envolvía todo, y una ligera brisa soplaba del sureste. Los edificios que rodeaban la Plaza de la Revolución relucían sus vidrios ahumados y su metal bruñido ...
Los toques en la puerta te hicieron afinar el oído en el baño; volvieron a tocar. Ahora, segura de que te buscaban, gritaste: Me estoy bañando. Insistieron y gritaste: ¡Vaaa, que me estoy bañando!
Los...
Llegas a la casa sudando; la noticia de la muerte de Ismael y Papo en la cárcel, te golpeó fuerte. Nunca pensaste en eso, y la verdad es que no querías que les pasara nada; los echaste pa´lante por la...
Ahora escucharía el ratatata ratatata ratatata ratatata de la máquina de escribir, no la música del grafito del lápiz. Tengo hambre. Suspiro. No paro de escribir. Luego, con calma, leo y releo lo ya h...
Pupy es la única hermana de Nena y, es el caso, también mi única tía. Es un bebé que no quiere ser destetado y está pagando caro ese capricho suyo con la infancia. Para Nena, había mucho de holgazaner...
[fragmento de novela inédita]
Hago una foto y la nube parece un edificio de Manhattan. Es de los rotundos inmuebles que se levantan en Times Square, intento sugerirle al aporreador, que restablece sus...
En una época en que sentía que el vacío aplastaba mi vida cotidiana, y no solo la mía, sino quizás también la de mi país, encontré, en la posibilidad de soñar, un escape. Nada me reconfortaba tanto. S...
Las manos tratan angustiadamente de ensartar el hilo… llevo tantos años intentándolo que he perdido la visión, la juventud y hasta la claridad de mi mente. Ya no como, ya no duermo, tampoco hago el am...
Todo comenzó cuando tuvo acceso ilimitado a una computadora. Ahora podía ordenar sus libros por autores, temáticas, lugares y algo muy importante, intentaría ser escritor. Escribir, escribir su vida, ...
Era el cubano más feo que ojos humanos habían visto, pero tenía la más completa colección de objetos usados por Severo Sarduy durante su estancia en La Habana.
Aquella fue una temporada de fruct...