ÍNDICE
- Fidel Castro: actor de musicales
- La dimensión desconocida, episodio “El espejo” (1961)
- Topaz (1969), de Alfred Hitchcock
- Bananas (1971), de Woody Allen
- Up the Sandbox (Casada en Nueva York, 1972), de Irvin Kershner
- Los Simpson, episodio “El problema con los trillones” (1998)
- Company Man (Lío en La Habana, 2000), de Peter Askin
- The lost city (La ciudad perdida, 2005), de Andy García
- I love Miami (Dios o Demonio, 2006), de Alejandro González Padilla
La figura de Fidel Castro, controvertida y polarizadora, ha sido representada en el cine de maneras que a menudo han oscilado entre la idealización, la parodia y el ataque frontal. Personaje secundario, referenciado o como parte de un contexto narrativo determinado, Fidel ha dejado su huella en el cine y la cultura popular.
Del mismo modo, hay un aspecto menos conocido de la vida de Fidel, vinculado a sus esfuerzos por alcanzar el éxito como actor en el Hollywood clásico de los cuarenta. Aquí te mostramos varios de estos episodios, relacionados tanto con las representaciones de la imagen de Castro como con su “carrera” cinematográfica.
Fidel Castro: actor de musicales
A pesar de que la prensa cubana nunca ha mencionado nada sobre este hecho, varios medios internacionales sí se han referido a la intervención de Fidel en el cine estadounidense.
Escuela de sirenas (Bathing Beauty, 1944) es la primera película de la que se tiene noticia en la “filmografía” de Castro. Este musical, dirigido por el célebre realizador George Sydney, incluye coreografías acuáticas y fue considerada una renovación en el género para su época.
Asimismo, se le puede encontrar en la comedia de enredos Easy to wed (Que siga la boda, 1946), junto a una piscina, y en Holiday in Mexico (Vacaciones en México, 1947), también dirigida por Sydney.
El nombre de Fidel como actor fue divulgado por el cinéfilo Julio Lista, quien lo identificó en el libro The Best of MGM: Golden Years 1928-1959, escrito por J.R. Parish y G. W. Mank.
La dimensión desconocida, episodio “El espejo” (1961)
Este episodio fue escrito por el guionista Rod Serling, quien lo describió como "la historia de un tirano y sus asesinos, un sueño destrozado y la muerte de una causa". En este caso, como suele suceder con muchas películas de ficción del siglo XX referidas a Fidel Castro, no se le llama por su nombre real, sino que se crea un personaje a imagen y semejanza del cubano.
El actor Peter Falk interpreta en este caso a Ramos Clemente, un dictador latinoamericano que parece "perder la cordura" al contemplar su imagen en un espejo.
Topaz (1969), de Alfred Hitchcock
"Masacrada y denostada pieza de culto de Alfred Hitchcock, humillada y ninguneada por cuestiones políticas", afirma el diario La Verdad de Vargas en su reseña sobre este filme.
El argumento de la película se desarrolla en 1962, en medio de la tensión de la Guerra Fría, arrancando con una majestuosa parada militar del Ejército Rojo en Moscú. Paralelamente, en Dinamarca, un oficial de la inteligencia soviética logra desertar a Estados Unidos con el apoyo de agentes de la CIA, llevándose consigo a su esposa e hija.
"John Vernon no interpreta a Fidel Castro, es verdad, pero su personaje es muy Fidel Castro. Considerado el mejor Castro de la historia del cine", aseguran en el medio citado más arriba.
Bananas (1971), de Woody Allen
En la película Bananas (1971), dirigida y protagonizada por Woody Allen, existe un personaje construido como parodia de Fidel Castro. Este filme es una comedia en clave irónica de las revoluciones en Hispanoamérica, que terminaban siendo aún peores que el régimen al que derrocaban.
"Así como el revolucionario convertido en dictador delirante es fácilmente identificable con Fidel Castro (), su subalterno y finalmente enemigo tiene un claro aire al Che Guevara",
Up the Sandbox (Casada en Nueva York, 1972), de Irvin Kershner
Up the Sandbox es una película estadounidense de comedia y drama de 1972, dirigida por Irvin Kershner y basada en la novela homónima de Anne Roiphe. Margaret Reynolds, interpretada aquí por Barbra Streisand, es una joven esposa y madre que vive en Nueva York, quien se sumerge en fantasías sexuales cada vez más extrañas para escapar de los problemas de su vida cotidiana.
Una de ellas, acaso la más "atrevida", consiste en ser "poseída sexualmente" por Fidel Castro (en la piel de Jacobo Morales, que repite en este papel después de la Bananas de Woody Allen), con quien comparte unas copas, baila y, finalmente, tiene "contacto íntimo".
Es bastante célebre la aparición de Fidel Castro en la conocida serie animada Los Simpsons, durante el episodio 20 de la novena temporada. Aquí, el “Comandante” tiene parlamentos tan memorables como el “Todos sabíamos que esta patraña no podía sostenerse”, haciendo referencia a la crisis terminal de la Isla, o el “Voy a llamar a Washington, les diré que ellos ganan”.
Aun así, el momento más recordado sucede cuando Fidel le roba un billete de un trillón de dólares al Sr. Burns, Smithers y Homero Simpson, quienes se ven obligados a abandonar la Isla en una balsa improvisada.
Company Man (Lío en La Habana, 2000), de Peter Askin
Durante la década de los 60, Alan Quimp (Douglas McGrath) es un maestro de gramática inglesa, casado con la exigente Daisy Quimp (Sigourney Weaver). Para esquivar las constantes mofas de la familia de Daisy, Alan pretende ser un agente secreto de la CIA.
El actor Anthony LaPaglia interpreta aquí a Fidel Castro, cuya escena más importante (en el video) consiste en una transmisión radiotelevisiva en la que empiezan hablando de economía, pero terminan conversando de casi cualquier otra cosa.
"No hay nada más sagrado que nuestra economía", comienza su parlamento este Fidel.
The lost city (La ciudad perdida, 2005), de Andy García
Este filme, opera prima del actor cubano Andy García como director, cuenta con guion del escritor Guillermo Cabrera Infante. La historia está ambientada en La Habana de finales de 1958, a punto de ser derrocado el régimen de Fulgencio Batista.
El protagonista, Fico Fellove (Andy García), es dueño de El Trópico, uno de los clubes nocturnos más distinguidos de La Habana. "La historia no está lejos de Casablanca, pues el protagonista es también el dueño de un local de éxito que quiere mantenerse imparcial".
Fidel Castro (Gonzalo Menéndez), después de la huida de Batista, invita a Fico a compartir mesa en un bar (en el video), algo que no complace mucho a este último.
I love Miami (Dios o Demonio, 2006), de Alejandro González Padilla
Esta película "muestra las dos caras de la Cuba americana: la de los cubanos que se limitan a perseguir el 'sueño americano', y la de los disidentes", según se puede leer en Filmaffinity.
I love Miami narra cómo Fidel Castro (Juan Luis Galiardo), sufre un atentado mientras se encontraba en un barco gubernamental mexicano. Así, Fidel naufraga en las costas de Cayo Largo (La Florida) con la cara y la barba parcialmente quemadas, lo que lo hace irreconocible.
Incorporado a la comunidad cubana en Miami, muy a su pesar, Fidel ("protegido" bajo el pseudónimo "Alejandro") conoce de cerca los deseos e inquietudes de los trabajadores del bar El Mojito, un sitio donde pasará más tiempo del planeado.
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