Con el bienestar del pueblo como objetivo primordial, el Grupo de Administración Empresarial S. A. (GAESA) instituye lo que vendría a ser la primera organización no gubernamental creada por el gobierno para encauzar debidamente el flujo de las remesas que entran al país y evitar la fuga de divisas, en tanto el viajero que emigra recibe un servicio de probada calidad.
La suspensión por parte de la Western Union de sus operaciones en Cuba, significó el cierre de una puerta, pero otra se abrió cuando la empresa Orbit S. A. asumió sus funciones. Sin embargo, de los 1084,01 millones de dólares recibidos en el país por concepto de remesas durante 2021, 1083, 61 millones fueron a parar a manos de los coyotes que conducen a los migrantes por toda Centroamérica hasta Estados Unidos.
Con razón ha sido complicado para los niños tomarse su vasito de leche semanal. Durante los cinco primeros meses de este año, cerca de 47 000 cubanos viajaron a Nicaragua por vías legales y no se detuvieron hasta cruzar la frontera norteamericana con México. Además, no hubo manera de recuperar los más de 10 000 dólares que cada uno de ellos dejó regado por el llamado “camino verde”.
Con razón ha sido complicado para los niños tomarse su vasito de leche semanal.
El general de división Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, director de GAESA, decidió poner remedio a esta situación y propuso la creación de la ONG Coyotex, con la participación financiera de la corporación Meliá Hotels International S.A., el Cártel del Pacífico a cargo de la logística y el apoyo legal del hermano gobierno nicaragüense. Todo bajo la atenta supervisión del compañero Ernesto Soberón Guzmán, director general de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior, quien ya ha denunciado “las dificultades de un grupo de cubanos al intentar viajar a países de nuestra región inmediata” y el engorroso afán de Washington en “obstaculizar el procesamiento de los nuevos visados en las embajadas acreditadas en La Habana”.
GAESA, con intereses en los sectores del turismo, inversión financiera, importación, exportación y remesas, garantiza con la creación de Coyotex que la ayuda económica enviada por cubanos residentes en el exterior a sus familiares en la isla, no se dilapide en manos de guías no acreditados por la ONG cubana o termine como soborno a policías que no figuran en la nómina de Coyotex, para que no apresen los migrantes o los deporten.
Los servicios ofrecidos por Coyotex al emigrante cubano incluyen la venta de refrigerios a los que esperan por visados de tránsito en las sedes diplomáticas de los terceros países que lo exigen para llegar a Nicaragua; entrenamiento para el cruce de ríos y selvas; facilidades para la compra de pasajes para la ruta aérea La Habana-Managua, cuyo precio suele mantenerse cerca de los 5000 dólares, además de guías confiables y policías bien dispuestos en cada uno de los países de la ruta nicaragüense hasta los puntos fronterizos de México con Estados Unidos.
Con los ingresos obtenidos de esta labor humanitaria desarrollada por la dirección de GAESA, el gobierno revolucionario cubano proyecta garantizar casi la totalidad de los diecinueve productos que componen la canasta básica familiar, el polvo lácteo para la elaboración de la leche que se distribuye a niños y ancianos, la adquisición de sucedáneos orgánicos para el café que se expende en las bodegas, la compra de productos no radioactivos para la fabricación de embutidos y sustitutos cárnicos, la importación de yuca para la producción de harina de trigo, la adquisición de maquinaria para la extracción de cáscara de papa y garantizar la importación de azúcar crudo desde Groenlandia.
La noticia de la creación de Coyotex y el uso proyectado para los ingresos de la nueva ONG fue recibida con júbilo por las organizaciones políticas y de masas cubanas, las cuales han apoyado y alentado desde los primeros años de la Revolución esa necesidad tan cubana de conocer nuevas culturas. Heredada, con toda seguridad, de aquellos ancestros que hace más de medio siglo descubrieron el continente americano.