El Monumento “Encuentro”, instalado en 2017 por el escultor Óscar Ponzanelli, representaba a Fidel Castro y al Che sentados en una banca, en la colonia Tabacalera, en Cuauhtémoc, Ciudad de México. Desde su inauguración provocó controversias y sufrió actos de vandalismo como pintadas e intentos de robo.
El 16 de julio de 2025, la alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, ordenó su retirada por falta de permisos y violaciones a normas del espacio público. Además, calificó a quienes figuran como homenajeados en ellas de “asesinos”. Después del desmantelamiento, grupos de la embajada cubana en México y colectivos de solidaridad, comunistas asociados al régimen, se movilizaron para exigir el retorno de las estatuas, con pancartas que decían: “Esta calle es de Fidel”.
En respuesta, un grupo de exiliados cubanos se reunieron en el parque, portando imágenes de presos políticos como Luis Manuel Otero Alcántara y Duannis León Taboada. El periodista José Luis Tan Estrada, forzado al exilio por la represión del régimen cubano tras años de acoso y detenciones, publicó en redes sociales el 27 de julio de 2025: "Hoy, un grupo de cubanos exiliados en México dejamos claro, desde el parque donde estuvieron las esculturas de Fidel Castro y el Che, que nuestros verdaderos héroes no son de bronce ni de piedra: están presos, perseguidos o desterrados por la dictadura que ellos impusieron en Cuba".